lunes, 31 de diciembre de 2007

javier krahe en el café central, madrid

14 días seguidos ha estado javier krahe presentando en madrid su último libro-disco, "querencias y extravíos". y 14 días han tenido que pasar para que in extremis consiga ir, de la mano de un amigo, a verle.

el café central no vende entradas anticipadas. ni siquiera las vende en la puerta los días antes. es un café cualquiera en el que puedes esperar sentado en una de sus mesas o sillas bebiendo café o cerveza desde la sobremesa a que a eso de las diez de la noche comience la actuación. en este caso, fueron solo dos las horas de espera. recompensa: visión parcialmente reducida de la banda pero escucha privilegiada. y menos mal que no le dimos al alcohol durante la espera... habríamos visto mucho peor.

javier krahe, sí, ese personaje de apariencia cada vez más hirsuta pero a la vez tan entrañable. no creo que nunca me atreviera a decirle nada por miedo a ser protagonista de una de sus brillantes letras. se presenta rodeado de "toda su banda": percusionista (jimmy ríos) dotado de decenas de recursos, saxo/flauta/clarinere (andreas priwtitz) que imagina infinitas melodías paralelas a las que desliza el propio krahe en cada canción, guitarrista de maneras jazzísticas y agradablemente contenido y contrabajista (fernando anguita) burlón de maneras saltarinas musicalmente hablando (al menos a mis oídos). todos (quizás andreas, a los vientos, no, pero no le veo desde mi silla) le hacen esos ocasionales y "tan marca de la casa" coros kraheíanos al unísono.

javier krahe aparece al frente del escenario. como siempre le he recordado. pelo (blanco) alborotado, barba (blanca) algo descuidada. delgada y menuda figura y un nerviosismo patente entre canción y canción que solo desaparece en cuanto empieza a recitar cada una de las tonadillas o cantinelas que hoy nos ofrece. (
curioso lo del nervio en las geniales presentaciones de cada tema. curioso porque desaparece en cuanto canta).

las cosas que cuenta presentando cada número son dignas de los mejores monólogos de esos agotados "clubs de la comedia". a camino entre lo absurdo y lo genial, cercano al humor "inteligente", ese de varias vueltas de tuerca que tan bien hacen faeminos y cansado. seguramente hay poca improvisación en estas alocuciones, pero no por ello dejan de ser enormemente geniales.

el concierto se divide en dos partes: entre medias un descanso, visiten nuestro bar, para descargar la vejiga y ver si se compra o no uno de sus últimos nueve discos a la venta: ¡¿pero cuántas grabaciones tiene este hombre?! sí, claro, es verdad... que son ya seguramente más de treinta años...

el estilo musical es bastante definido y repetitivo. bases jazzísticas que van envolviendo el recitar de krahe. su voz profunda que se mueve en poco más de una octava. su entonación tan característica. nadie ha cantado de esta manera. se reconoce aún al brassens, creo, que su única referencia reconocida. todo , música y letra, está perfectamente acoplado. y estoy seguro de que parece fácil pero no debe serlo.

krahe aprovecha esta peculiar manera de hacer melodías para insertar con pasmosa facilidad sus versos. versos casi siempre geniales para canciones que cuando son buenas, son muy buenas. y que si a veces son menos interesantes, al menos siempre se puede sacar algo de todas ellas. sorprende la ausencia casi completa de temática política o religiosa. uno esperaba mucha más caña a estos colectivos. y abundan las extravagantes historias de amor y sexo.

a bote pronto recuerdo la hilarante "no todo va a ser follar", la poca perspicaz visión del marido abandonado ("dónde se habrá metido esta mujer"), la clásica entre las clásicas (kazoo incluído) "marieta", esa enumeración de sus cien amores titulada "abajo el alzheimer", esa pasional declaración de amor/odio de "contigo y sin ti", la surrealista "diente de ajo", la historia del pescador de la costa de ese país imaginario que es suiza ("en la costa suiza"), la genial "eros y civilización" en la que intenta evitar no liarse con una antigua novia porque serían el detonante de un desternillante fin de la civilización, esa "perversa leonor", ¿quién es capaz de escribirle una canción, aunque por temas de cuernos sea, a "navalagamella"?, ¿quién de hacer una canción a un geómetra como piero de la francesca, según él, petición de un grupo de scouts que necesitaban canción para cantar en sus salidas a la sierra?... y qué decir de esa odisea de ulises o de esa canción que según el propio krahe es el resultado de la preparación día a día durante esta serie de 14 conciertos...

marieta cierra el espectáculo. no hay más concesiones a los primeros tiempos (el burdo rumor, la hoguera). pero no hay problema.

krahe se despide hasta más ver. marchamos con una sonrisa en la cara. ha sido un rato agradable. podía haber sido genial pero en mi opinión no lo ha sido. debe ser difícil encontrarse una noche a krahe interpretando el repertorio ideal de cada uno, esas 15 canciones desternillantes que hagan el concierto verdaderamente irrepetible.



4 comentarios:

Anónimo dijo...

"No creo que nunca me atreviera a decirle nada por miedo a ser protagonista de una de sus brillantes letras". Buena frase.

Le he visto un par de veces en directo y, para mí, ni es tan genio como dicen los que le adoran, ni tan abominable como aseguran sus detractores (que los tiene, me dí cuenta hace poco en Popmadrid). Es asín: conjuga momentos brillantes, de carcajada, con otros más pasables, cercanos al bostezo. Ahora, tiene momentos antológicos.

rogersincero dijo...

como krahe lea este blog y le de por hacernos unos pareados...

estoy completamente de acuerdo con tu comentario. a veces roza el tedio y de repente estás en medio de la antología del mejor humor.

Anónimo dijo...

Hola!!!

Te invito a que veas la entrevista que le han hecho Mara Torres y Carlos del Amor a Javier Krahe en La 2 Noticias.

Tienes el vídeo aquí:

Vídeo de la entrevista a Javier Krahe

Saludos

Mara Torres Página no oficial (Labana blog)

Anónimo dijo...

Increíble, citas a toda la banda por su nombre y te ¿olvidas? de decir que el guitarrista es Javier López de Guereña. El único que va con el en absolutamente todos sus conciertos desde hace lo menos veinte años. ¿Te ha hecho algo o qué?